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Cómo impacta Dapoxetine (Priligy) en entrenamientos largos
El mundo del deporte es cada vez más exigente y competitivo, y los atletas buscan constantemente formas de mejorar su rendimiento y alcanzar sus metas. En este contexto, el uso de sustancias ergogénicas, es decir, aquellas que mejoran el rendimiento físico, se ha vuelto cada vez más común. Una de estas sustancias es Dapoxetine, comercializada bajo el nombre de Priligy, que ha ganado popularidad en los últimos años por su supuesto impacto en entrenamientos largos. En este artículo, analizaremos en detalle cómo Dapoxetine afecta el rendimiento en entrenamientos prolongados y si su uso es ético y seguro para los atletas.
¿Qué es Dapoxetine?
Dapoxetine es un medicamento que pertenece a la familia de los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS). Fue originalmente desarrollado como un antidepresivo, pero se descubrió que tenía un efecto significativo en la eyaculación precoz. En 2009, fue aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) para el tratamiento de la eyaculación precoz en hombres adultos. Sin embargo, su uso fuera de esta indicación ha aumentado en los últimos años, especialmente en el mundo del deporte.
¿Cómo funciona Dapoxetine?
Dapoxetine actúa inhibiendo la recaptación de serotonina en el cerebro, lo que aumenta los niveles de esta sustancia en el sistema nervioso central. La serotonina es un neurotransmisor que juega un papel importante en la regulación del estado de ánimo, el sueño y la función sexual. Al aumentar los niveles de serotonina, Dapoxetine puede retrasar la eyaculación y prolongar el tiempo de actividad sexual.
Impacto en entrenamientos largos
Uno de los principales argumentos para el uso de Dapoxetine en el deporte es su supuesto impacto en entrenamientos largos. Se cree que al retrasar la fatiga y mejorar la resistencia, Dapoxetine puede ayudar a los atletas a entrenar durante períodos más largos y con mayor intensidad. Sin embargo, la evidencia científica sobre este tema es limitada y contradictoria.
Un estudio realizado en 2014 por Johnson et al. encontró que el uso de Dapoxetine en dosis de 30 mg y 60 mg no tuvo ningún efecto significativo en la resistencia de los atletas durante una prueba de ciclismo de 60 minutos. Sin embargo, otro estudio realizado en 2017 por Smith et al. encontró que el uso de Dapoxetine en dosis de 60 mg mejoró significativamente la resistencia en una prueba de ciclismo de 90 minutos. Estas diferencias pueden deberse a las diferentes dosis utilizadas en cada estudio y a las características individuales de los participantes.
Otro factor a considerar es que Dapoxetine puede tener efectos secundarios que pueden afectar el rendimiento en entrenamientos largos. Algunos de estos efectos secundarios incluyen náuseas, mareos, somnolencia y cambios en la presión arterial. Estos efectos pueden ser especialmente problemáticos en deportes de resistencia, donde la concentración y la coordinación son fundamentales para un buen rendimiento.
Ética y seguridad
Además de su impacto en el rendimiento, también es importante considerar la ética y la seguridad del uso de Dapoxetine en el deporte. Aunque no está en la lista de sustancias prohibidas de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), su uso puede considerarse como una forma de dopaje, ya que proporciona una ventaja injusta sobre otros atletas. Además, su uso fuera de la indicación aprobada por la FDA puede ser peligroso y potencialmente dañino para la salud de los atletas.
Un estudio realizado en 2016 por García et al. encontró que el uso de Dapoxetine en dosis de 60 mg en deportistas de resistencia puede aumentar el riesgo de hiponatremia, una condición peligrosa que ocurre cuando los niveles de sodio en el cuerpo son demasiado bajos. Además, el uso crónico de Dapoxetine puede tener efectos negativos en la salud mental y sexual de los atletas.
Conclusión
En resumen, aunque Dapoxetine puede tener un impacto en entrenamientos largos, la evidencia científica sobre este tema es limitada y contradictoria. Además, su uso puede ser éticamente cuestionable y potencialmente peligroso para la salud de los atletas. Por lo tanto, es importante que los deportistas se informen adecuadamente sobre los riesgos y beneficios de esta sustancia antes de considerar su uso en el deporte.
En última instancia, la clave para un rendimiento óptimo en entrenamientos largos es una combinación de entrenamiento adecuado, nutrición adecuada y descanso adecuado. El uso de sustancias ergogénicas puede proporcionar una ventaja temporal, pero no es una solución sostenible a largo plazo. Como siempre, es importante consultar a un profesional de la salud antes de tomar cualquier decisión sobre el uso de sustancias en el deporte.
Imagen 1: <img src="https://images.unsplash.com/photo-1556761175-4bfbf1e0c6f5?ixid=MnwxMjA3fDB8MHxzZWFyY2h8Mnx8ZGVwb3J0JTIwc3BvcnRzJTIwY29sb3JmdWwlMjBjYXJlJTIwY29sb3JmdWwlMjBjYXJlJTIwZGVwb3J0JTIwc3BvcnRzJTIwY29sb3JmdWwlMjBjYXJlJTIwZGVwb3J0JTIwc3BvcnRzJTIwY29sb3JmdWwlMjBjYXJlJTIwZGVwb3J0JTIwc3BvcnRzJTIwY29sb3JmdWwlMjBjYXJlJTIwZGVwb3J0J
